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02/01/2020
El presidente de la Cámara de Comercio de Río Grande, José Luis Iglesias en comunicación con RADIO PROVINCIA, habló sobre la reunión que mantuvo con el secretario de Comercio de la Provincia Aníbal Chaparro.
Dijo que “a Chaparro lo conocíamos de haber trabajado en gestiones anteriores en la Secretaría de Comercio y nos pusimos de acuerdo enseguida en los lineamientos para empezar con las reuniones más urgentes. Queríamos por lo menos manifestarle dónde podíamos hacer énfasis para ayudar a superar la situación comercial y dar mejor respuesta a la comunidad”.
“Estuvimos hablando del programa de Precios Cuidados, del Ahora 12, que se prorrogó a nivel nacional. Hay un montón de circunstancias para ordenar en Río Grande en cuanto a la obligatoriedad de tener posnet en toda la actividad comercial, para aceptar tarjetas de débito. Esto a veces no se cumple y quedamos de acuerdo en hacer una campaña a ese efecto, porque es obligatoria la aceptación de las tarjetas de débito sin cobrar recargo, y tenemos conocimiento de situaciones irregulares en este punto”, agregó.
Subrayó que “no se puede hacer recargo y debe ser el mismo precio de contado, lo mismo para tarjeta de crédito en un pago. El negocio puede optar por no tener tarjetas de crédito, pero debe tener tarjeta de débito, o dedicarse a otra cosa. Esto es obligatorio para cualquier actividad comercial, no solamente un negocio, y no se puede hacer recargo porque es una contravención y está sujeto a una multa”.
“En nuestra Cámara hemos recibido quejas no sólo de comerciantes sino de empleados, y nos parece importante reforzar este aspecto. Desde CAME estamos trabajando para pedir la baja en los aranceles para operar con tarjetas de crédito. A partir de 2020 van a ser del 1%, con las tarjetas de débito es el 0,9% y, si quieren cobrar el 10% a la persona que en ese momento no tiene efectivo, me parece una exageración”, sostuvo.
Al ser consultado sobre las ventas de fin de año señaló que “no fue peor el escenario de lo que teníamos previsto. Pudo haber sido peor y notamos un cambio de humor, que es un aliciente para nuestra actividad. Hay una especie de ganas de hacer cosas desde las instituciones y eso es bueno”.